El futbolista, desde el amateur hasta el profesional, debe ser un deportista integral, que no sólo sea poner una pelota en el césped, asfalto o tierra y jugar, que no sólo espere su oportunidad llevándola de primero en una caimanera o esperando desde las inferiores de algún club que le observe un caza talentos, el futbolista debe y tiene que ser su propio entrenador, su propio tutor, su propio arbitro, su propio campo, su propio fans, su propia hinchada, su propio equipo y lo más importante, debe ser su propio rival.
En este sentido, me es grato escribir este humilde artículo sobre jóvenes que son verdaderos deportistas integrales, que han demostrado y siguen demostrando que ni el sistema ni los recursos tienen por qué ser una limitante.
Sólo es necesario el deseo de jugar y hacerlo en el nivel más alto posible, cuando no hay entrenador, te entrenas a ti mismo; cuando no hay campo, te entrenas en la calle; cuando no hay sol, te entrenas bajo la lluvia; cuando no hay ganas, las ganas te buscan y ya te habrán encontrado.
De este modo, han ido trabajando durante más de 2 años, con muchos altos y bajos en el proceso, con obstáculos superados y otros que en algún momento no lograron superar, los FUTBOLISTAS, y a su vez, estudiantes de la Universidad Católica Santa Rosa (UCSAR), quienes por mérito propio hoy por hoy están en una etapa importante, en un momento de arranque definitivo hacia lo que ellos siempre han querido, demostrar que son unos cracks con la caprichosa.
Recientemente, con sus propios recursos y con otras alternativas lícitas para obtener dinero, los jugadores ucsaristas lograron inscribirse en la liga Lipesam, que reúne varios equipos de fútbol de universidades e institutos universitarios, y que además, será una buena primera experiencia como grupo para aplicar lo que ellos saben hacer.
De momento, una derrota y un empate en sus primeros dos partidos contra la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV) y la Católica Andrés Bello (UCAB) respectivamente, son un balance positivo para estos chicos, que de seguro irán de menos a más, porque como individuos son talentosos, su sed por ganar es insaciable y su trabajo en equipo poco a poco se convertirá en un solo bloque con cerebro, brazos y piernas.El día de mañana, jugaran su tercer partido de liga contra el Instituto Universitario Francisco de Miranda, ellos ansiosos y los que los apoyan y siguen, a la expectativa, pero con apoyo incondicional sea cual sea el resultado.
De mi parte, los felicito a todos como equipo, no por lo que han hecho <que ha sido mucho y muy complicado>, los felicito por lo que lograrán, que serán cosas mayores, con dificultades quizás, con obstáculos posiblemente, con saboteos que seguro los habrá, pero aún asi lograran algo importante.
“El triunfo sin obstáculos es una simple victoria, pero la victoria con grandes adversidades es un triunfo con sabor a gloria”
